Amor, Deseos, Historias, Personal

SING A HAPPY SONG

Miro por la ventana y sólo diviso luces, flores y conejitos saltando por el prado.
Debo estar en alguna clase de sueño porque la vida no suele ser así de perfecta.
Sonreír es algo incorporado a mi rutina y se me olvida porque lo hago.
Por fin estás aquí… llegó el momento de cantar nuestra canción.

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Historias

LA CASI VIUDA

Es uno de esos días de mierda. Esos días en los que no estás de humor para nada, sólo quieres dormir, mirar algún programa y esperar hasta que se acabe el día. No hacer nada, no quieres problemas, no quieres escuchar ninguna voz, no ver a nadie, pero no puedes. Estás atascada en el mismo lugar, intentando poner atención a la misma rutina de cada día, leyendo los mismos párrafos idiotas, asistiendo a las mismas reuniones sin sentido y mientras los otros hablan, tú te imaginas recostada en tu cama, escuchando alguna canción que logre curar en algo tu corazón.

Imposible. Nada puede curar lo que estás sintiendo, excepto él, pero ya no está aquí y tu corazón está roto… y sientes rabia, no porque esté muerto y eso es lo peor. Es un sentimiento egoísta y odias sentirte así, pero no puedes detenerte. Él se fue y tú no tienes permiso de sentir dolor porque esos momentos especiales que atesorabas en tu interior siempre fueron un secreto, un maldito secreto… y cada vez que piensas en eso, te desmoronas.

¡Y ni siquiera está aquí! ¡No puedes enojarte con él! ¿¡Cómo puedes sentir rabia con un muerto!? Tienes rabia. Quieres gritarle, decirle cómo te sientes, pero si no lo hiciste cuando estaba vivo, ahora ya es muy tarde como para enmendar el error. No tienes respecto por ti y te das cuenta porqué las cosas tienen que ser hechas como siempre te dijeron.

Nunca escucharás su voz de nuevo. Nunca le dijiste que te habías enamorado de él y que todavía lo estás. ¿Qué es lo que más te hace daño? ¿El silencio? ¿Eres así de egoísta? Sí, lo eres. Quizás lo que más te molestaba era su indiferencia, porque el silencio se traducía en “no me importas” pero sin palabras y por alguna estúpida razón, ahí te quedaste.

El mundo sigue dando vueltas y tú no tienes tiempo para hacer tu duelo. Eres la viuda no oficial, igual que en las películas. Te sientes como un personaje de ficción, nada parece real. Caminas sólo porque el resto camina: es una especie de imitación de la vida. Tratas de verte feliz, sonríes, incluso te ríes pero estás actuando. ¡Es falso! ¡Sé una mujer! ¡Llora! ¡Llora si quieres llorar! ¡Necesitas llorar!

No puedes.

Mírate. Mira tu cara. Sí, esa es tu cara. Eres un maldito desastre y te escondes del resto. ¿Hasta cuándo? ¡Despierta! La gente te está hablando y él ya no va a volver.

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Amor, Desamor, Escapar, Historias, Incertidumbre, Infatuation, Mente Borrada, Mentira, Miedo, Mistake

TODO LO CONTRARIO

Las cosas no deberían ser así, de hecho, la vida no debería ser así. ¿Cuándo aprenderé a no sentirme estúpida? En realidad, la pregunta debería ser ¿cuándo dejaré de ser estúpida y me convertiré en una persona pensante y medianamente coherente?

Demasiadas frases hechas rondan mi cabeza, pero ninguna se ajusta a lo que siento en estos momentos y tampoco logro sacarme del cuerpo esa sensación de inutilidad y de querer arrancar al sitio más oscuro y lejano de todo lo que conozco y olvidarme de lo que me ha hecho sentir que creer en la palabra y mirar a los ojos es sólo una pérdida de tiempo.

¿Creer? No. ¿Confiar? ¿Para qué?. ¿Fingir? La opción a seguir. ¿Callar? Sin alternativa. ¿Alejarse? Medianamente imposible. Y ahora, ¿qué sigue?

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