Aunque el pensamiento cruzó por mi mente, el leerlo fue confirmar el peor de mis miedos… no sé como enfrentarlo. Tengo pena y mientras escribo, siento la sangre fría y la cabeza revuelta. He perdido toda claridad y me cuesta mantener la sonrisa.
Lo peor de todas estas situaciones [absurdas y no obligatorias], es que a pesar de todo, debo ser yo, debo enfrentarme al mundo con la mejor de las caras y asumir todas las culpas y los pecados.
Sé lo que tengo que hacer, pero no soy idiota y tengo claro que no podré por un largo tiempo [aunque quiera].
Lo que resta es enfrentarse a ese periodo en el que el cuestionamiento reemplaza el sueño y las palabras pierden el significado… la realidad golpea con todas sus fuerzas, sin miramientos ni remordimientos y como era de esperar, tú simplemente te quedas al centro de todo, y esperas que yo no salga demasiado dañada [como si te importara]…
Me equivoqué… mientras escribía esto, escribí tu nombre y lloré… no quiero…
Esta es la parte triste… pero absolutamente evidente, la historia que traté eliminar pero resultó imposible, una vez más me doy cuenta que en la vida hay cosas con la que simplemente no se puede pelear…
Trataré de dormir [tengo mis dudas de poder]. A ver si es posible despertar…
PS: Esta incoherencia se debe simplemente a que en este momento no tengo ningún orden mental…